Karlis Romero sobre la ortodoncia: Los aparatos no son una moda

Karlis Romero comenzó la semana con una nueva visita al odontólogo para seguir corrigiendo el problema de su salud bucal. La actriz venezolana, quien mantiene a sus seguidores informados de su día a día, no se le escapó compartir el proceso de la ortodoncia.

La criolla, que está enfocada en mejorar su sonrisa, entre otras cosas, también resaltó la importancia de realizar este tipo de tratamientos con profesionales del área.

En esta nueva cita, Karlis contó que le colocaron doble liga para corregir y cerrar los espacios en sus dientes delanteros. Hasta los momentos el procedimiento ha corregido solo la mitad de la distancia y que pronto le colocaran la fijación final. Tendrá los aparatos solo unos meses, según contó en Instagram.

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Sin problemas por los aparatos

Asimismo, Karlis Romero destacó que el tratamiento estético ha sido mejor de lo que ella se hubiese imaginado.

“Pensé que me iba a sentir extraña con aparatos y de verdad que los estoy amando. Me encanta como se ven. Estos son de cristales de zafiro (creo que se llaman así) por eso no se notan mucho, pero si se ve un poco porque lleva una cadenita para cerrar los espacios”, detalló.

La modelo aprovechó para dar su recomendación para todos aquellos que hacen de la salud bucal una moda.

“Cada caso es diferente. Los aparatos no son una moda porque les gusten o se vean bonitos. No se ponen en peluquerías ni nada de eso porque es la salud de tu diente. Eso lo pone un doctor”, recomendó.

Desde que comenzó con el tratamiento, Romero ha enfatizado que la sonrisa es una carta de presentación importante para cualquier cosa a la que te dediques, e inclusive, hasta para la autoestima y por eso hay que cuidarla.

Problemas con la mordida

El pasado mes de marzo, Karlis Romero contó que tenía que ponerse aparatos y detalló su problema bucal.

Romero explicó que tuvo ortodoncia anteriormente y que estaba usando retenedores, pero el procedimiento no evitó que sus dientes se movieran, lo que la llevó a tener problemas con la mordida.

“Tendré que usarlos de tres a cinco meses, después vamos a cambiar las carillas que tengo de resina por carillas de porcelana, que son carillas que no se parten y se mantienen en el tiempo intactas”, dijo.

Y agregó: “Uno se tiene que cuidar los dientes y uno no lo entiende hasta cierta edad… a mis 14 años yo comía demasiado hielo, mi mamá me decía: ‘no comas hielo’, pero yo en esa etapa me destrocé las muelas, muchas muelas, incluso yo tengo dos coronas que tengo que cambiarme luego de este proceso, porque tengo unos pernos y se ahí como un color extraño de esas coronas, tuvieron que hacerme tratamiento de conducto y muchas cosas a esa edad”.