Kesha lloró al hablar de su nuevo disco

Ya está a la venta el tan esperado disco de la cantante Kesha, quien nuevamente disfruta las mieles del éxito con el estreno de su canción personal Praying, la cual no solo significa su gran regreso a la industria musical, sino una clara confesión de que cuando atravesaba por su difícil situación con el director Dr. Luke, estuvo a punto de suicidarse.

Este viernes, 11 de agosto, salió a la venta de forma oficial el nuevo álbum de Kesha Rose, aquella que hace un par de años paralizó al mundo con el himno Tik Tok, el cual se convirtió por mucho tiempo en el Baby One More Time de la rubia. Aunque el ostracismo del que fue víctima aún no termina -puesto que su batalla legal con Luke continúa-, igual se vislumbran tiempos mejores, pues hay un nuevo disco que promocionar.

Si bien ya son varios los singles que se conocen del disco, entre ellos Praying, Woman, Learn To Let Go y Hymn, hay mucho por saber del álbum más personal de la estrella, quien en el pasado compuso la canción Till The World Ends para la Princesa del Pop, Britney Spears.

Good Morning America fue el espacio elegido por la cantante para ofrecer el estreno del disco. Desde allí, bastante afligida y afectada por el proceso que atraviesa, habló de lo que significa la creación de Rainbow.

Apenas conteniendo los sollozos, confirmó que Praying es una canción muy personal porque habla de los duros momentos que pasó y sobre cómo los superó, tratando de encontrar empatía “al otro lado, que es increíblemente difícil, a veces” –en clara alusión a Dr. Luke–.

Kesha afirmó que Rainbow la salvó de la muerte. En un tono más distendido, reconoció que no llamó al álbum de esa forma únicamente por empatía que tiene por la comunidad LGBTI+, sino también por los colores brillantes como una metáfora de esperanza. Compartió que su casa está decorada con montones de arcoíris.