18 abril, 2024

Foto cortesía EFE

Este lunes se conoció a través de fuentes oficiales que la deforestación en la Selva Amazónica tuvo un ascenso de 29, 5 por ciento entre agosto de 2018 y julio 2019, se contabilizan por lo menos 9.762 km2 de hectáreas dañadas. El estado más tocado es Pará, donde ha arrasado 3.862 km2.

Esta devastación también ha sido detectada vía satelital gracias a un sistema denominado Prodes que el Instituto Brasileño de Investigaciones Espaciales (INPE) utiliza para hacer estudios anuales.

Este flagelo a la naturaleza incluye los primeros meses de gestión del presidente de Brasil Jair Bolsonaro, quien ha brindado apoyo a las actividades agropecuarias y de minería en este importante pulmón vegetal. A la actividad humana se le sumaron los incendios forestales que azotaron la Amazonia desde el mes de agosto del año en curso.