Fabrizio Della Polla DeSimone | ¿Qué son los suministros industriales? ¿Para qué sirven?

La variedad es abundante en el mundo de los suministros industriales para oficinas, con pequeñas piezas como clips hasta otras de mayor tamaño como muebles

DAT.- Los suministros industriales para oficinas son aquellos materiales empleados por las empresas para facilitar el trabajo cotidiano y hacerlo más efectivo para que la producción aumente. Estos elementos se han adaptado a los cambios que han venido de la mano del crecimiento manufacturero, pues las necesidades que demanda este sector han aumentado.

Actualmente los requisitos de seguridad para este tipo de insumos son muy estrictos debido a que la protección de las personas es lo primordial, y es por eso que se debe contar con compañías suministradoras que garanticen con todo lo establecido en las leyes.

Explica Fabrizio Della Polla DeSimone que, dependiendo del tipo de negocio que lleva a cabo una empresa, los suministros industriales son diferentes. Sin embargo, existen una serie de elementos que básicamente son comunes en toda oficina. Además de pequeñas piezas que son muy útiles (clips para papel, blocks de notas, utensilios para escritura y engrapadoras), hay otras de mayor tamaño que también son de gran importancia. Entre ellas se encuentran:

• Cajas de papelerías: Existen varios negocios pequeños que ofrecen servicios de fotocopias, impresiones, elementos de papelería y encuadernación, mientras que otros se enfocan en vender artículos escolares. Para ello, las empresas que proporcionan los suministros industriales ofrecen a estos negocios una serie de cajas contentivas de todos los materiales para llevar a cabo las distintas actividades comerciales.
• Muebles para oficina: Para que los trabajadores estén bien cómodos a la hora de realizar sus labores es fundamental que tengan muebles ergonómicos, para conservar una buena postura a lo largo de la jornada laboral. Toda oficina debe contar con sofás para las áreas comunes, escritorios, sillas, mobiliarios con capacidad para guardado, entre otros.
• Aparatos electrónicos: Con la llegada de la tecnología, las labores en las oficinas se hacen más rápidas, lo que ahorra tiempo y dinero. Los equipos tecnológicos permiten que los trabajos más tediosos se vuelvan sencillos. Dentro de estos aparatos tenemos: computadoras de escritorios, laptops, enchufes múltiples, routers inalámbricos, discos duros, teclados, mouses y un largo etcétera.
• Productos de limpieza: La limpieza es fundamental en todo espacio, y la oficina no es la excepción. El área de trabajo debe permanecer limpia en todo momento para la seguridad física de los empleados. Dentro de los suministros industriales para esta actividad están: limpiadores de vidrio, desinfectantes, detergentes, escoba para barrer y trapeadores.
• Artículos para el baño: El baño es un espacio que toda oficina tiene que tener, el cual debe estar equipado con papel higiénico, toallas, jabones para las manos, toallitas húmedas. Además, debe contar con espejos, lavamanos, grifos de buena calidad e inodoros adecuados.
• Elementos para el salón de descanso: Tener en la oficina una zona de descanso, en donde los trabajadores puedan hacer una pausa luego del almuerzo es necesario para que tengan un respiro y seguir realizando sus actividades mucho más relajados. En este lugar debe haber: un mueble confortable, mesa para comer, sillas cómodas y filtro de agua.
• Equipos eléctricos: Toda oficina debe ser un lugar agradable y acogedor, para ello tiene que contar con aire acondicionado, planta eléctrica, en caso de que la electricidad falle, y calentadores. También puede tener un televisor o proyector para utilizarlo en las reuniones de trabajo.

LEA TAMBIÉN | Fabrizio Della Polla | ¡Conócelas! Grasas saludables que debes comer

Existen empresas que ofrecen distintos tipos de productos y servicios para abastecer todos los insumos que se emplean frecuentemente en una oficina, desde las que proveen muebles a las que venden equipos electrónicos, pasando por algunas que suministran materiales de papelería.

Por Fabrizio Della Polla DeSimone