Oswaldo Nania | Importancia de la arquitectura en un desastre humanitario
DAT.- Con cada desastre humanitario que ocurre alrededor del mundo, una de las mayores pérdidas siempre se la lleva la arquitectura debido a la destrucción de importantes edificios y estructuras. Sin embargo, esta disciplina suele responder a la tragedia con resiliencia, apareciendo de inmediato como una solución en tiempos desoladores.
Explica Oswaldo Nania que el papel de la arquitectura va más allá de la estética y la funcionalidad de los espacios. En situaciones de crisis y desastres humanitarios, pasa de víctima a volverse una herramienta esencial para la supervivencia y recuperación de comunidades afectadas.
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La arquitectura, entendida como un conjunto de técnicas y conocimientos para diseñar y construir espacios, puede ser la diferencia entre la vida y la muerte en estos escenarios.
Primero, hay que mencionar la capacidad de la arquitectura para brindar refugio inmediato. En el caso de desastres naturales, como terremotos o tsunamis, la necesidad de un alojamiento seguro y rápido es esencial.
Estructuras temporales
Tiendas o módulos prefabricados, son soluciones que los arquitectos pueden diseñar considerando factores como la facilidad de montaje, la resistencia a condiciones climáticas adversas y la versatilidad de uso.
Recuperación de espacios después del desastre
Una vez superada la fase crítica de un desastre, las comunidades requieren infraestructuras más duraderas y adecuadas a su contexto cultural y geográfico. Aquí es donde los arquitectos, en colaboración con la comunidad, pueden diseñar escuelas, hospitales y viviendas que pueden funcionar como temporales o permanentes de acuerdo a las necesidades.
Adicionalmente, la planificación urbana, intrínsecamente ligada a la arquitectura, puede prevenir o mitigar los impactos de desastres. Zonas bien planificadas, con sistemas de drenaje eficientes, vías de evacuación claras y espacios públicos versátiles pueden reducir considerablemente los daños humanos y materiales.
En resumen, la arquitectura en situaciones de desastre humanitario no es un lujo, sino una necesidad. A través de soluciones innovadoras y contextualizadas, los arquitectos tienen el poder de transformar la adversidad en oportunidades para construir un futuro más seguro.
(Con información de Oswaldo Nania)