Los Códigos Sagrados y el feng shui sistémico

Los números nos han acompañado en el desarrollo de la humanidad desde que el hombre es hombre, y la comprensión del funcionamiento matemático y geométrico fue la piedra basal para poder comprender el lenguaje fractal que se manifiesta desde el macrocosmos hacia el microcosmos.

Los números son la manifestación abstracta de la energía. Vibran, materializan, equilibran y dan forma y sentido al mundo que nos rodea. Desde el teorema de Pitágoras, la ley de gravitación universal, la teoría de la relatividad y la mecánica cuántica son solo algunos ejemplos de cómo los números y la disciplina matemática han marcado el rumbo de nuestra historia.

Todo el universo es energía, nuestros pensamientos y emociones emiten al campo cuántico o éter, información electromagnética que es leída por dicho campo en forma de frecuencia de onda, y no de partícula. Cada cosa que nos rodea es un cúmulo de átomos vibrando en forma de partícula u onda. Cada color, cada nota musical, cada sonido, cada rayo de luz es una manifestación de energía.

Los números son los personajes principales de este tema ya que le dan forma y contenido a los Códigos Sagrados y como el Feng Shui Sistémico los aplica con intención para sanar, activar y controlar la energía de los espacios y sus habitantes.

Los códigos sagrados numéricos de Agesta, códigos de Grabovoi o números mágicos son frecuencias electromagnéticas decodificadas en patrones numéricos que mueven y expresan energía disponible. Al igual que una palabra que define algo y le da forma a la experiencia, emitir ciertos códigos numéricos al campo cuántico facilita procesos en cada uno de nosotros. Estos códigos fueron canalizados por Gabriel Uribe

Algunos autores aseguran que son un recurso que La Divinidad ha dejado para que vivamos en plenitud. Son números que mueven energías dependiendo de la situación que debamos trabajar y sanar. Por esta razón es que el Feng Shui Sistémico los incorpora dentro de su práctica accionando con intención. Es vital tener la conciencia que, para activar determinadas vibraciones externas, primero hay que activarlas dentro de nosotros. Recuerda “Como es adentro es afuera”

Para activar un Código Sagrado es esencial estar lo más concentrados posibles en eso que deseamos solucionar o conseguir. El número elegido de acuerdo al deseo debe ser repetido 45 veces, mental o con la altura o elevación de la voz que desees. Puedes usar como guía los dedos para contar, Japamala o collar de 45 cuentas, cordón con 45 nudos o cualquier sistema de conteo apropiado para ti. Lo mejor es hacerlo todos los días por un período de 21 días ininterrumpidos. Pueden citarse como una sola cifra o de uno en uno.

La casa, tu templo sagrado tiene vida, su propia energía y espíritu. Cuando sientes que algo está mal en ella hay que tomar acciones para limpiar y sanar. Además de soltar aquello que perturba y llena de toxinas y mala vibra, cómo, por ejemplo:

• Objetos que ya no utilizan por rotas, feas, quemadas, dañadas.

• Ropa que no te gusta o no utilizas hace tiempo.

• Plantas muertas o enfermas.

• Recibos, periódicos, revistas antiguas.

• Medicamentos vencidos

• Medias viejas, con huecos y zapatos estropeados.

Practicar los Códigos Sagrados conectan con lo deseado incluso limpiar y liberar la casa de energía perniciosa. El Código Sagrado 715 conecta con SANAR UNA CASA.

Sigue estas instrucciones y manos a la obra: