Camilo Ibrahim | ¡Entérate! Crowdfunding Inmobiliario: ¿Qué es? ¡Funcionamiento y ventajas!
DAT.- El crowdfunding es una forma de micromecenazgo que permite a personas con proyectos personales o profesionales conseguir financiación sin recurrir a bancos o financieras. El sistema es muy sencillo: la persona que necesita fondos explica su proyecto y lo que necesita para llevarlo a buen término, y decenas, cientos o miles de micromecenas aportan su granito de arena para hacerlo posible.
Explica Camilo Ibrahim que esa misma lógica, aplicada a los bienes raíces, da lugar al crowdfunding inmobiliario, un sistema de inversión colaborativa que permite comprar inmuebles o invertir en promociones inmobiliarias aunando las aportaciones de varias personas. Esa inversión cooperativa generará una plusvalía en el futuro, cuando el inmueble sea vendido o alquilado.
Este sistema es cada vez más popular entre los inversores, porque permite invertir en bienes raíces con poco capital, por ejemplo, a través de las llamadas startups inmobiliarias o proptech, plataformas digitales que hacen de intermediario entre los inversores y los promotores inmobiliarios.
Estas plataformas suelen funcionar online, de manera que ellos se ocupan de analizar el mercado y encontrar las mejores posibilidades de inversión para que el cliente (el inversor) no tenga que preocuparse por nada. Eso permite que particulares que no conocen mucho el mercado inmobiliario, puedan invertir con cierta seguridad y comodidad.
Contenido
Funcionamiento
El funcionamiento del crowdfunding inmobiliario sigue las mismas premisas de los crowdfundings orientados a proyectos personales o profesionales. El punto de partida es un proyecto que requiere financiación. Puede tratarse de un promotor inmobiliario que quiere construir o rehabilitar un inmueble o de una empresa que quiere comprar una aldea abandonada y convertirla en un resort turístico, o cualquier otro proyecto. Solo tiene que llamar la atención de una startup inmobiliaria que crea que puede interesar a sus clientes. Esta empresa selecciona el proyecto y lo publica como oferta.
El inversor accede a esta oferta de forma completamente digital, desde un ordenador o dispositivo móvil, y realiza una inversión. Esta inversión puede tener la forma de un préstamo con una de interés concreta o implicar una participación en los beneficios futuros de la promotora. Normalmente, en el crowdfunding inmobiliario se puede invertir desde cantidades muy pequeñas, asumibles por cualquier persona, y también hay unos límites. Después, solo hay que esperar hasta recibir los beneficios.
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Ventajas y desventajas
Es posible invertir sin disponer de grandes capitales. Mientras que en las formas de inversión tradicional hacía falta disponer de mucho dinero (como mínimo lo necesario para adquirir un inmueble), el crowdfunding inmobiliario permite inversiones muy bajas.
La posibilidad de invertir desde muy poco capital hace que la inversión sea accesible a rentas medias e incluso bajas, democratizando el acceso al mercado inmobiliario. El hecho de invertir mediante una startup de crowdfunding inmobiliario permite, además, invertir sin tener amplios conocimientos.
Facilita el proceso de recaudación de fondos de las inmobiliarias y constructoras. Gracias al crowdfunding inmobiliario se pueden iniciar pequeños proyectos sin apoyo de los bancos o se puede combinar el crowdfunding inmobiliario y los préstamos bancarios. Ambas vías de financiación son compatibles y pueden ser complementarias.
Simplifica el contacto entre pequeños inversores y promotoras e inmobiliarias. Las proptech realizan el trabajo de prospección en el mercado en busca de proyectos que antes debía ser el inversor. Así, quién quiera invertir puede hacerlo accediendo a una oferta de proyectos ya seleccionada y revisada.
Permite invertir en otros mercados. El crowdfunding inmobiliario funciona de forma transnacional, es decir, puedes invertir en proyectos inmobiliarios de todo el mundo sin salir de casa. Eso no estaba al alcance de los pequeños inversores antes, ya que para ello hacía falta estudiar el mercado en cuestión.
Permite la diversificación de las inversiones. Al no exigir la compra de un inmueble ni un desembolso elevado de capital, el crowdfunding inmobiliario permite repartir el capital invertido en distintos proyectos. Eso, en general, revierte en una mayor seguridad de la inversión, ya que las pérdidas que pudieran derivarse de uno de ellos podrían ser absorbidas por los beneficios en otro.
Abarata los costes financieros asociados a la operación.
Obviamente, el crowdfunding inmobiliario también tiene algunas desventajas respecto a las inversiones tradicionales, y no está de más tenerlas en cuenta. Las más importantes son las siguientes:
- No deja de ser una forma de inversión y, por tanto, tiene un riesgo.
- Se trata de una forma de inversión muy reciente, así que no está debidamente regulada en todas partes.
(Con información de Camilo Ibrahim)