19 abril, 2024

Una Comisión Especial de la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional (AN) resolvió, tras largas investigaciones realizadas entre agosto y diciembre de 2016, que las denuncias de corrupción hechas por el Diputado Julio Montoya en contra del empresario venezolano Mauro Libi Crestani (Presidente del Grupo Libi) carecían de argumentos para sostenerse.

Fue el Diputado Carlos Berrizbeitia quien, además de presidir la mencionada Comisión Especial, recomendó dar por cerradas todas las indagaciones que se iniciaron al momento de levantarse las acusaciones (en agosto de 2016) y que, por cierto, contaron con las comparecencias de un Libi Crestani que bien supo defenderse y demostrar su inocencia.

Esas recomendaciones, claro, fueron aprobadas en diciembre y al final, lo dicho, se publicó una clara y contundente resolución titulada ‘Resolución No. 34’ que, además de mandar a cerrar las denuncias del Diputado Montoya, dejó muy en evidencia que todas las investigaciones demostraron que Mauro Libi ni incursionó en hechos delictivos ni lesionó el Patrimonio Público de la República.

La ‘Resolución No. 34’ (que se puede leer al completo bajo esta nota) fue aprobada por toda la Comisión Permanente de Contraloría de la AN y, a su vez, suscrita por la Subcomisión Sectorial para el Control del Gasto Público e Inversión del Ejecutivo Nacional, Entes Descentralizados, Institutos Autónomos y Empresas del Estado.