Urumaco: secretos de una fauna que pasó
Vestigios de un mundo olvidado en los albores del tiempo se esconden en la tierra de Urumaco, región del estado Falcón que alberga el yacimiento paleontológico más rico de todo el norte de América del Sur. Es esa diversidad la que se exhibe en el Museo de Ciencias de Caracas en la muestra expositiva Urumaco. Riqueza en un desierto.
Esta región en la época de la colonia fue un hato y años más tarde, con la explotación petrolera, tuvo su apogeo a través del campo El Mamón, pero que luego fue cerrado en 1932. Hoy día guarda entre sus tierras la prueba de lo que hace millones de años fue su fauna.
Y es que en el lugar abundaron perezosos gigantes, roedores que pesaban más de 300 kilos, tortugas acuáticas de más de tres metros, anacondas, toninas, armadillos gigantes, criaturas similares a dantas, manatíes, gaviales de diez metros de largo y, hasta un caimán de unos once metros de largo, criaturas inimaginables para la actualidad, pero que eran propias del periodo neógeno.
El paleontólogo venezolano Jorge Carrillo Briceño exaltó las bondades de Urumaco, tras una expedición que realizó en el año 2007 y la definió como la región con más fósiles de toda Venezuela y del norte de América del Sur.
«Urumaco es de gran importancia a nivel internacional. La teoría más aceptada (acerca de las especies encontradas) se ha sustentado en el llamado Paleo-Orinoco, cuando gran parte de la Amazonía estaba cubierta por grandes lagos, pantanales, ríos y ciénagas que drenaban hacia el norte (…) Muchos de los peces fósiles de agua dulce encontrados en Urumaco y otras regiones del estado Falcón, son especies que hoy en día habitan exclusivamente en las cuencas del Orinoco y el Amazonas”, destacó en cierta ocasión el experto, según refirió el boletín de prensa.
La curadora Maritza Arispe señala que la exposición exhibe 21 ejemplares de animales que existieron en la región durante las eras geológicas del Mioceno y Plioceno. “Esta es una muestra de la biodiversidad que existía hace 23 millones de años, ahorita tenemos otra fauna, pero debemos cuidar lo que ya tuvimos, que ya no existe, pero tenemos los fósiles de cómo era la vida en ese momento”, expresó.
Por su parte, la presidenta de la Fundación de Museos Nacionales, Mary Pemjean, expresó su complacencia por la exposición, que es una muestra de la riqueza cultural y científica con la que cuenta el país.
“Me alegra muchísimo saber que estos grandes tesoros que resguardamos en las bóvedas de los museos se puedan exhibir al pueblo venezolano. No todo el mundo puede decir que tiene estas piezas en sus bóvedas, es por ello, que debemos cuidar nuestro patrimonio (…) Estas piezas son únicas e invaluables y, aunque la paleontología no es una carrera que se estudia en Venezuela, nos sentimos orgullosos de que nuestros coterráneos vengan a su tierra natal a estudiar todas las maravillas que tenemos en nuestro país”, aseveró Pemjean.
Contenido
La muestra
Uno de los ejemplares exhibidos consta de un cráneo y una mandíbula asociada a un gavial gigante (especie de cocodrilo). Su peso alcanzaba los 1.745 kilogramos, con una antigüedad de 5,3 millones de años.
Asimismo, está el premaxilar de gaviálido que data de hace 8,5 millones de años; un cráneo y parte de mandíbula del gavial costero (de 10 millones de años) y la hemimandíbula izquierda del caimán gigante, cuya longitud oscila entre los 9 y 11 metros, un peso de 10.000 kg, y que vivió probablemente hace 5 millones de años.
También se encuentra la hemimandíbula del caimán rostro de pato, el cual medía hasta 11 metros, pesaba más de 4 toneladas y habitó hace 5 millones de años; el cráneo y mandíbula del caimán brevirostris (de 8,5 millones de años); la bóveda del cráneo y el cráneo del bagre marino, que medía 80 centímetros aproximadamente, pesaba alrededor de 30 kilogramos y data de hace 8 millones de años.
El caparazón y plastrón de un matamata fósil, de nombre científico Chelus colombiana (una especie de tortuga), que medía entre 41 y 47 centímetros, con un peso de 9 a 12 kilogramos y una antigüedad de 8 millones de años también se exhibe.
Otras piezas incluyen vértebras de pez teleósteo de género y especie indeterminada; el cráneo de la tortuga marisquera, que pesaba alrededor de 40 kilogramos (de 8 millones de antiguedad) y el fémur derecho del roedor Phoberomus pattersoni (parecido a una capibara o chigüire) con un peso de al menos media tonelada (vivió hace 6 millones de años).
De igual modo en la exposición, hay rastros del roedor Neoepiblemidae, que corresponde a una familia de grandes roedores que habitaban Suramérica hace 5 millones de años; de una vaca marina (13 millones de años); perezas de 185 kg y restos de un tiburón sierra, de 600 kg, (de hace 8 millones de años).
Datos de Urumaco
- Yacimiento. En esta zona está el más grande yacimiento paleontológico. Tiene formaciones rocosas del mesozoico y el cenozoico.
- Animales exóticos. Allí se encontró el Phoberomys pattersoni (similar a un chigüire) y de los sirénidos (parecidos a las focas).
- Restos humanos. También se hallaron los restos humanos más antiguos del país (de 14.000 años A/C.).


