9 diciembre, 2025

Se produce aquí pero el precio local lo ponen afuera, en el presente  y en el futuro!

Se produce aquí pero el precio local lo ponen afuera, en el presente  y en el futuro!

Así, ¿cómo se puede lograr la soberanía de un país?  ¿Se puede servir  a dos amos al mismo tiempo?,  es como navegar entre dos o más aguas simultáneamente, ¿cómo se le puede decir a esta locura?

El precio del café en venezuela ha pasado de ~US$ 5 por  400 grs -la trampa del marketing en cambiar ligeramente la cantidad para hacer pasar por debajo de la mesa el aumento- en enero  a US $8, para el 6 de junio, 60% en cinco meses. ¿Por qué habrá sido?, por una caída abrupta  en la oferta o un aumento en la demanda en la misma intensidad, por razones del clima, la siembra o cosecha, una huelga de transporte, una escasez de semillas, etcétera; ¿qué evento local y de qué  magnitud habrá afectado la producción, transporte y distribución,  la comercialización, etcétera?, para producir tal subida, y en USD pa’ más ñapa, como si fuera la moneda nacional que rige la economía real del país.

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Descubrimiento y expectativas de precios

Resulta ser que la cosa con los precios no es tan simple, una cosa es determinar el costo de producción y otra el precio final del bien o servicio en el mercado, por ello los economistas prefieren llamar a este proceso  que se da en el mercado descubrimiento de precios -quien escribe le ha llamado proceso de formación de precios.

Hay variables y factores a considerar, vinculados al encadenamiento productivo y a la cadena de suministros, estos se verán afectados por situaciones internas o externas, por dimensiones materiales, subjetivas y psicológicas.

 En el caso de Venezuela, la expresión monetaria de valor de  los bienes y servicios empleada es el USD, como ya se ha mencionado, ello induce a una variación de precios en moneda nacional desde afuera vinculada con un cambio de la tasa entre el BS.y el USD, en igual dirección.

Ahora, a este factor externo deberá agregarse el mercado internacional del rubro, si éste es un comoditi, como es el caso del café; así, si éste sube, aún cuando la mayor parte del café que se consume en el país es de producción nacional, la tendencia es a que los actores relacionados económicamente con el café  suban el precio, otra vez, inducción de precios. Excusa, no se quieren descapitalizar. Según el informe mensual de precios de comoditis del Banco Mundial (3-6-2025, BM) , el café de tipo arábica, que es el que se produce y consume en el país, pasó de US $7,57 el kilo, en diciembre del 2024, a US $9,05, en el mes de febrero de 2025, subió 19%. Hablamos de café verde, un café que debe ser tostado, molido, empaquetado, transportado, distribuido y comercializado. Esta podría ser una razón para ell aumento del precio al detal del café para el consumo en los 5 meses del año, pero en 60% de aumento, parece como exagerado, especulativo.

Mercado de futuro del café, un casino nice 

Otro  factor externo se suma: el de los mercados internacionales de derivados, en este caso de comoditis, como es el caso del café. En Nueva York y en Londres están sendos mercados ICE, mercados bursátiles intercontinentales, donde se negocian estos derivados del café, a través de los llamados contratos de diferencia a futuro. Es decir, un mercado internacional donde se apuesta a la subida y bajada del precio del café en el futuro, allí ni se compra ni se vende ni un saco de café. Se hace negocio con la incertidumbre pero a la vez se induce en el precio actual del café en el mercado físico internacional.

Para el 10 de febrero, el kilo de café en este mercado de futuro alcanzó los US $9, aumentó US $1,97 desde el 3 de enero,es decir un 28%, luego, ha descendido a US $7,77, al 10 de junio, un 13%. (Trading economics)

Lo llamativo es que el aumento en estos mercados internacionales se refleja de inmediato en el precio al consumo, al detal, pero una vez que bajan estos precios internacionales en los mercados locales  el precio sigue igual, misterios de la ciencia, ¿habrá algo de especulación allí?

Vaya,  poco de esto se enseña en las materias de ingeniería de proyectos o de negocios de las maestrías, mucho menos es lo que en la práctica hace el productor de café nacional ni tampoco es el criterio con el que los comerciantes de la bodega del pueblo manejan el negocio. 

Entonces, ¿este es uno de los avances de la globalización, la externalización de la fijación de los precios de algo producido en un país para su consumo nacional?,  ¿qué de bueno trae esto para el ciudadano de a pie?,  ¿cómo se protege de la volatilidad de los precios del café?, ¿por qué dejar que esta  variable exógena tenga peso en la determinación  del precio nacional?, ¿esto será otra evidencia más de la subordinación de la economía real a la economía financiarizada global  (mercado de derivados, en este caso de comositos como el café, el maíz, el arroz, el azúcar, la soya, el trigo, etcétera)? 

¿Así sucederá con los camarones, el pescado, el aguacate, el cacao, la carne, los huevos, los plátanos, entre tantos otros alimentos? Una vez que nuestros avispados especuladores comiencen a prestar atención a estos mercados internacionales.

La esperanzas y las expectativas siempre serán buen negocio 

O dicho de otra manera, explotar la mortalidad y la incertidumbre es un buen negocio.

A quién no le gustaría saber lo que le depara el futuro, en especial si puede aprovechar lo bueno y cambiar lo malo. 

A quién no le gustaría tener más control sobre la muerte, saber cuando va a salir del escenario de la vida, tener la posibilidad de alargar la vida, sin los achaques de la vejez, mantener la juventud. En las propagandas y en las campañas políticas prometer y predecir en estos dos aspectos atrae y vende.

Propuesta

Se ha sugerido un mercado cerrado a través de la moneda nacional marcada para el consumo (token o ficha), conjuntamente con un ingreso básico por hogar que cubra la canasta básica de bienes y servicios y con el Bolívar anclado en valor nominal a un bien que sirva de equivalente general de valor, se ha elegido un kilo de arroz, en todo caso un rubro cuyo consumo sea general y se produzca nacionalmente en su totalidad o en la mayor proporción. Dicho de otra manera, un mercado libre pero regulado para corregir las fallas del mercado, que expulse la especulación.

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