11 octubre, 2024

PILPERMIX | ¡Conócelas! ¡Clasificaciones de fibras para concreto!

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DAT.- Hablar de las fibras de concreto es hacerlo de esos aditivos que se utilizan en las clases de concreto convencional, añadiéndose durante la preparación de la mezcla para potenciar sus propiedades mecánicas. Mejoran tanto la durabilidad como resistencia del concreto y evita tanto la formación como crecimiento de las grietas.

Explican desde PILPERMIX, empresa presidida por Claudio Antonio Ramírez Soto, que igualmente funcionan como material de refuerzo, aumentando la capacidad de carga del hormigón y haciendo que este responda adecuadamente ante tensiones, principalmente en casos en los que la construcción estará sujeta a condiciones adversas o cargas cíclicas.

Ahora bien, hay dos clasificaciones que abarcan fibras de materiales específicos: macrofibras y microfibras. Ambas difieren en su funcionalidad, geometría, proporción y características. Veamos cada una con detalle a continuación y los tipos que comprenden.

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Microfibras

Esta clasificación abarca aquellas fibras cortas y delgadas, cuyo diámetro es menor que 0.3 milímetros. Destacan por ser excelentes para prevenir y controlar a nivel microscópico el agrietamiento causado por retracción en el hormigón. Las microfibras suelen fabricarse con plásticos, por ejemplo, nylon, polietileno y polipropileno.

Fibra de polipropileno

Las microfibras de polipropileno están compuestas por filamentos delgados y largos que parecen cintas rectangulares. Tienen una apariencia brillante y, originalmente, fueron desarrolladas por la colaboración entre el sector petroquímico y textil, donde se utilizan ampliamente.

Presenta varias propiedades, por ejemplo, reduce notablemente el peso de componentes prefabricados y, a la vez, aumenta el comportamiento plástico y la maniobrabilidad del concreto antes de que ocurra el fraguado. Asimismo, evita las deformaciones en el material al canalizar con eficiencia las cargas puntuales. Con respecto a sus aplicaciones, podemos mencionar la preparación de mortero y concreto pretensado y la elaboración de pavimentos de hormigón impreso y de tejados.

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Macrofibras

Su tamaño es más grande, superando los 0.3 milímetros de diámetro. Permiten que incremente a nivel macroscópico tanto la ductilidad como la resistencia a la tracción del concreto, además es posible utilizarlas como reemplazo a las varillas de refuerzo y las mallas electrosoldadas que son comunes en las obras de concreto y suelen conllevar altos costos. Entre los materiales usados para su fabricación, destacan materiales naturales, sintéticos y acero.

Fibras de acero

Este material está conformado por láminas pequeñas de acero inoxidable. Se obtienen a partir de la escoria que genera el sector siderúrgico y presentan una apariencia fina y ligera, optimizando así las propiedades del hormigón sin aumentar considerablemente su peso.

Al igual que las microfibras, disminuye las probabilidades de agrietamiento y aumenta la resistencia ante fatiga. Con respecto a sus aplicaciones, suele utilizarse en materiales prefabricados, como cubiertas, losas o muros, asimismo, se emplea en elementos estructurales, por ejemplo, vigas y columnas.

Fibras naturales

Esta variante se produce con material orgánico y biodegradable, ya sea hebras de coco, bambú, caña de azúcar y ciertas especies de árboles. Las fibras que estos aportan suelen tener un diámetro menor que 0.5 milímetros. Su uso se remonta desde hace mucho tiempo, lo que se debe a su fácil obtención e implementación y su bajo costo de producción. Igual presenta buenas propiedades, como resistencia a la tracción y al desgaste y buena ductilidad. Con respecto a sus aplicaciones, destaca la producción de revestimientos para hormigón, elementos decorativos y pavimentos de concreto.

(Con información de PILPERMIX)