Piel joven y radiante – Últimas Noticias

La exposición al sol, al aire y la contaminación, el consumo de tabaco y la falta de vitaminas y minerales, llevan a que la piel se seque y provoque arrugas prematuras, flacidez y opacidad. También, debido a que la piel contiene 70% de agua y 13% de capa córnea, que es la superficie, cuando está por debajo de estos porcentajes, se debilita y deteriora; por lo que es importante mantener el agua necesaria en nuestra piel mediante una alimentación balanceada y la aplicación de productos y rituales que la hidraten.
Es cierto que las pieles secas y sensibles son mucho más propensas a deshidratarse, sin embargo las pieles mixtas y grasas también necesitan productos hidratantes o remedios caseros que les ayuden a mantener su humedad natural. “La mayoría de ellas sufren en forma constante de la agresión de limpiadores o jabones muy fuertes que alteran su pH, con lo que la piel se reseca y obtiene una apariencia poco saludable”, comenta la dermatóloga Nancy Echeverría, quien comenta que existe una gran variedad de cremas, sueros y tónicos con agentes antioxidantes y anti-irritantes diseñados especialmente para hidratar este tipo de pieles, “pero no se debe abusar de ellos ya que se pueden formar células muertas en el cutis o bien éste puede perder su capacidad de auto-recuperarse”.
Los factores que provocan la deshidratación son tanto externos, asociados a las perdidas hídricas, como internos, debido a la incapacidad para retener el agua suficiente. Sin embargo, existen varias cosas que puedes hacer para ayudar. Además de tener hábitos alimenticios balanceados y cuidar adecuadamente tu cutis, puedes recurrir a tratamientos de spa o de dermatólogo que te ayuden a hidratar tu piel. Los baños en aguas termales, saunas, baños de vapor, exfoliaciones y faciales, son una buena medida para mejorar el nivel de humectación e hidratación de tu piel, ya que mejoran la condición de la capa córnea, favoreciendo el intercambio de minerales, y le dan una limpieza profunda al cutis, eliminando impurezas y células muertas.
También es común que las mujeres tengan un poco de cada tipo de cutis en distintas épocas del año, por lo que se recomienda cambiar de productos dependiendo de la condición en la que tu piel se encuentre.
SIGNOS DE SEQUEDAD
• Piel escamosa.
• Acumulación excesiva de células muertas.
• Falta de elasticidad y flexibilidad.
• Flacidez.
• Irritación.
• Tono de piel desigual.
• Aspecto opaco y grisáceo (falta de luminosidad).
• Aparición de líneas (apariencia ajada).
• Desestabilización del PH (manto ácido).
CONSEJOS BÁSICOS
• Beber mucha agua para hidratar desde el interior. Al menos un litro de agua para compensar la transpiración.
• Evita los refrescos ricos en azúcares.
• La exfoliación es ideal para ayudar a la piel a respirar y facilitar la penetración de los productos hidratantes que se apliquen.
• Ignora los productos agresivos y utiliza tratamientos de limpieza que neutralizan la cal del agua.
• Compra un humidificador y ponlo en tu casa o en tu habitación. Enciéndelo en la noche después de aplicar tus cremas.
• Utiliza todas las mañanas y noches una crema que contenga aceite.
• Toma baños relajantes aplicando gotas de aceite en el agua. No te bañes con agua muy caliente porque secará tu piel.
• Reduce el uso de la secadora de pelo.
• Ten en tu bolso un pequeño tubo de pomada para los labios. Los labios sufren mucho, especialmente si tienes la tendencia de chuparte los labios porque los siento resecos.
LA CREMA ADECUADA
Al momento de elegir es esencial que sepamos la diferencia entre hidratante y humectante. Una crema es hidratante porque actúa aportando la cantidad de agua que necesita la célula para sus funciones metabólicas, actuando en el ámbito de las capas profundas de la piel. Estas cremas son ricas en ceramidas, vitaminas E, C, A, minerales, aminoácidos, oligoelementos, etc., destinados a restablecer el llamado NMF (factor de Hidratación Natural) cuyo objetivo es mantener la piel hidratada.
Una crema es humectante porque actúa en forma de barrera protectora en la piel evitando la evaporación del agua que contiene el tejido. Además por su efecto osmótico, favorece la captación de agua del medio ambiente integrándose a la superficie cutánea y restableciendo así el manto ácido de la piel, el cual mantiene el cutis protegido contra la acción de factores dañinos del medio ambiente, restableciendo el PH. Estas cremas son ricas en glicerina, urea, alantoína, pantenol, etc., sustancias capaces de retener humedad en superficie.
SOLUCIONES CASERAS
MANZANA: Sus importantes propiedades humectantes ayudan mucho a las pieles deshidratadas. Se debe mezclar una manzana rayada con una cucharada de miel y algunas gotitas de jugo de naranja.
PAPA: Hidrata y descongestiona el rostro, sobre todo en las pieles normales. Se debe mezclar una papa deshidratada con leche descremada.
TOMATE: Gracias a sus sales minerales y vitaminas A, B, y C, es muy útil para las pieles grasas con tendencia al acné, ya que puede revitalizar y tonificar el cutis, especialmente si se lo combina con jugo de apio, pero también si, simplemente, se aplican sus rodajas sobre la piel.
ALOE VERA: Excelente para las pieles grasas y mixtas, ya que ayuda a hidratar y alivia las irritaciones provocadas por el sol. Sin embargo, para evitar cualquier tipo de reacción alérgica, sería conveniente no ponerla directamente sobre la piel, sino macerar sus hojas, sacarles el jugo, cocinarlo a baño de María, y diluirlo con algunas gotas de agua.
ACEITE DE GIRASOL: Al aplicarlo sobre la piel, forma una barrera que impide la evaporación del agua, por lo que es ideal para hidratar pieles secas.
NOTA: Para tener la piel en buenas condiciones es necesario utilizar productos hidratantes adecuados a cada tipo de piel.