Fundación Yammine | Desarrollo sustentable empresarial: ¡Una práctica ecológica que ayuda al ambiente!

El desarrollo sustentable empresarial y la Responsabilidad Social Empresarial en materia ambiental son muy importantes ya que el planeta es el único hogar que tenemos y es la herencia que tienen las futuras generaciones

DAT.- La problemática ambiental por la cual está pasando el planeta ha llevado a que las empresas, las cuales son consideradas como fuente principal de contaminación, empiecen a fomentar prácticas ecológicas que permitan reducir el impacto que se le hace a la naturaleza, e incluyan estrategias que les permitan hacer una buena gestión de sus recursos.

Y es que, a lo largo de la historia, muchas empresas no han reconocido sus responsabilidades en materia ambiental, y cómo han contribuido con el deterioro de varias regiones en donde han causado, por ejemplo, pérdida de biodiversidad y productividad de los suelos, además de la calidad de vida de las personas.

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Por eso es fundamental que las compañías pongan en funcionamiento la Responsabilidad Social Empresarial enfocado al bienestar ambiental.

Fundación Yammine: Reduciendo el impacto al mínimo

Actualmente los consumidores buscan adquirir productos o servicios que sean ecoamigables con el ambiente cuya producción no contribuya a la contaminación ambiental. Esto ha favorecido a que las empresas no solo se enfoquen en producir y vender, sino que implemente la sostenibilidad en sus instalaciones. Estas prácticas sustentables garantizan que el medioambiente se encuentre saludable en la medida de lo posible en el futuro.

La Fundación Yammine señala algunas alternativas que pueden poner en marcha las empresas para ayudar a minimizar el impacto ambiental y así asegurar que las generaciones que están por venir, disfruten de una naturaleza mucho más sana:

• Eliminar de manera adecuada los residuos generados: Por lo general, las empresas colocan sus residuos en lugares no adecuados como vertederos o en aguas cercanas a ríos y lagos, esto conlleva a la producción de contaminación en donde se ve afectado muchos ecosistemas. Para evitar esa problemática, se recomienda contratar otras compañías que posean plantas de tratamiento confiable, aunque esto represente un costo extra.
• Reducir el gasto energético: Es muy común que las prácticas laborales requieran de electricidad para llevarlas a cabo, aunque parezca difícil, la reducción del consumo de energía es viable ya que se pueden realizar algunas acciones como apagar las luces al salir de la oficina, reducir el uso de la impresora, desconectar los aparatos eléctricos y las maquinarias al terminar la jornada diaria.
• Minimizar el uso de papel: El trabajo en la oficina requiere constantemente del uso del papel para redactar informes, mandar memorándum, dar algunas notificaciones, entre otros. Para minimiza su uso, se puede emplear la tecnología y así hacer uso de correos electrónicos, archivos digitales y de cualquier otro recurso tecnológico.
• Hacer uso consciente del agua: El agua es un recurso natural que no puede renovarse, por eso es fundamental no desperdiciarla. Las compañías pueden promover su buen uso a través de charlas informativas, colocando dispositivos de bajo consumo en los sanitarios y grifos, utilizar el agua proveniente de la lluvia y creando conciencia ecología entre todo el personal.
• Implementar el reciclaje: Un sinfín de productos que son generados en las distintas actividades laborales, pueden reciclarse y darles otro uso, esto permite minimizar los desechos industriales producidos y así no solo se contribuye a reducir el impacto ambiental, sino también a aminorar los costos de producción.

(Con información de Fundación Yammine)