A través de tu mirada: aquí se acaba todo
Netflix estrena en su plataforma el cierre de la trilogía “A través de mi ventana” con “A través de tu mirada“ (o “a través de tu ventana 3“).
Esta nueva película de amor juvenil supone el final de una historia que comenzó en 2021 con “A través de mi ventana” y que continuó un año después con su secuela “A Través del mar“, ambas dirigidas por Marçal Forés y protagonizadas por Clara Galle y Julio Peña Fernández.
En nuestro blog de cine queremos hablarte de un estreno que, muy probablemente, acaparará la atención de los amantes de los romances juveniles y, por supuesto, de aquellos que disfrutaron de las novelas de Ariana Godoy en las que se basa la trilogía.
Contenido
Sinopsis de A Través de tu mirada
Después de lo que pasó en verano, Ares y Raquel no ven la forma de seguir con su relación y deciden separarse. Pero cuando se reencuentran en invierno en Barcelona, no pueden negar el amor y el deseo que sienten el uno por el otro. ¿Darán con la fórmula para volver a estar juntos?
Crítica de A través de tu mirada
“A través de tu mirada” es una película tan continuista en todos sus apartados que sentimos que, tal y como era de esperar, no estamos viendo nada nuevo. Después de haberla visto, no he podido evitar preguntarme si no hubiera sido mejor hacer una serie de esto, pues no me queda claro si la poca evolución que vemos en sus historias justifica la producción de tres películas diferentes.
Personajes que no evolucionan
No espero que el guionista, Eduard Sola, nos entregue una narrativa con la madurez y la complejidad emocional de “Vidas pasadas” de Celine Song, centrada también en el reencuentro de dos enamorados que no pueden corresponderse. Sin embargo, tras dos películas, sería razonable esperar una evolución en los personajes. En cambio, en “A través de tu mirada” nos encontramos con individuos estereotipados y extremadamente simples, lo que me hace replantearme si el público juvenil (a quien los protagonistas quieren representar) se verá representados en ellos. Y es que a pesar de que han transcurrido casi quince años desde películas como “A tres metros sobre el cielo” o “Crepúsculo“, parece que, según la visión de ciertos guionistas adultos, los adolescentes continúan etiquetados en roles convencionales como “el malote“, “la chica insegura” o “el amigo gay“.
La historia
Como decía al comienzo, considero que la trama de la película no es lo suficientemente novedosa como para justificar la producción de una nueva entrega. La cinta anterior concluyó con un giro argumental que prometía tener un gran impacto en la vida de los personajes. Sin embargo, al inicio de esta secuela, parece que dicho acontecimiento carece de relevancia para todos los involucrados. En vez de explorar las repercusiones emocionales y evolutivas en los personajes a raíz de este suceso, la película se enfoca en encadenar una escena erótica tras otra, relegando el potencial narrativo a un segundo plano.
Del mismo modo, la cinta concluye como todo el mundo supone que debe concluir. Aunque hay algún suceso que busca aportar frescura a una historia que va del punto A al punto B, en definitiva es una obra tan predecible que aburre, coronándose con un tercer acto bastante absurdo.
En definitiva…
Soy consciente de que no formo parte del público objetivo de este tipo de películas. No obstante, tras haber analizado numerosas cintas de romance juvenil, me encuentro repetidamente con la misma reflexión: el público adolescente se merece más. Aunque entiendo que el cine debe ofrecer diversidad para satisfacer a todos los gustos, desde un punto de vista narrativo, me parece incluso insultante simplificar las experiencias y emociones juveniles de una manera tan extrema.
A pesar de que la segunda entrega fue, en mi opinión, algo superior respecto a su predecesora, actualmente creo que lo mejor de esta “A través de tu mirada” es que, por fin, la trilogía se acaba aquí. Este cierre nos ofrece la oportunidad de hacer una reflexión acerca de cómo se pueden contar historias que realmente lleguen a tener un mayor impacto entre el público juvenil, dejando de lado los estereotipos y la simpleza emocional tan rebosante en la saga de Ariana Godoy.
