26 abril, 2024

José Gregorio Hernández es el único que podría unir y reconciliar a Venezuela

El padre Gerardino Barracchini ha trabajado en la Causa del Venerable para que la Santa Sede le confiera el estatus de “beato” tan esperado por miles de venezolanos


La Causa del Dr. José Gregorio Hernández es la de todos los católicos venezolanos, y persigue una sola cosa: la beatificación de este médico trujillano por los milagros concedidos a aquellos que le oran con mucha fe.

Más allá de un logro para la Iglesia Católica venezolana, beatificar a El Venerable ayudaría a reconciliar espiritualmente a la familia venezolana y traer la tan anhelada paz.

“En estos momentos de crisis, además de levantar nuestra autoestima, José Gregorio Hernández es el único personaje que podría unir y reconciliar a Venezuela, ya que supera toda ideología, raza, condición social o académica”, dijo el padre Gerardino Barracchini, quien ha trabajado arduamente en su causa.

A su juicio, José Gregorio Hernández es patrimonio de todos, siendo, además, el único médico que puede curar las enfermedades espirituales, “el odio, la intolerancia, la venganza y el individualismo, entre otros. José Gregorio reconciliaría a este país y nos traería la paz tan anhelada”, aseguró.

El sacerdote sostiene que esta causa también fortalecería el trabajo de la iglesia en guiar a los venezolanos al renacer espiritual, quienes -a su juicio- somos afectados por conductas, antivalores y actitudes no propias de Dios.

“Hay que volver a Dios, al Dios de la vida, al Dios que protege la dignidad de todo ser humano, al Dios que ofrece vida y en abundancia”, enfatizó el clérigo.

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El camino de la beatificación

Recibir el estatus de Beato por El Vaticano no es una simple firma, pasa por todo un proceso espiritual y científico que debe ser revisado minuciosamente en cada etapa.

El primer paso se dio en 1949, cuando la Iglesia Católica postuló al Dr. José Gregorio Hernández para su canonización, esto ante el creciente respeto que ganaba en la población venezolana.

El segundo paso se logró en 1972 cuando la Santa Sede lo declaró Siervo de Dios. En 1975 sus restos fueron exhumados del Cementerio General del Sur y llevados hacia la Iglesia Nuestra Señora de La Candelaria de Caracas, donde reposan actualmente y recibe cientos de visitas cada día.

El tercer paso fue logrado en 1986 cuando el papa Juan Pablo II le confirió el estatus de Venerable.

Para lograr el cuarto paso, el estatus de Beato, El Vaticano debe certificar la realización de un milagro gracias a la intervención directa del postulado.

“La beatificación no es un derecho que se adquiere con solo ser postulado como Siervo de Dios (…) El reconocimiento del presunto milagro debe pasar arduos y exigentes pasos una vez que se cumplen todos los requerimientos desde que empieza la fase Romana”, explica el sacerdote que ha trabajado directamente con esta causa.

Primero se debe emanar el decreto de validez jurídica y posteriormente la elaboración del fattispecie cronológica, que es un resumen hecho por la postulación que consigna todas las pruebas, evidencias y testimonios ante la Congregación para las Causas de los Santos de El Vaticano.

Dicho expediente debe ser revisado por peritos médicos y ser aprobado por un Congreso Médico (constituido por unos 7 especialistas) quienes deberán reconocerlo como un hecho que va más allá de la ciencia. Luego pasa por una evaluación del Congreso Teológico y finalmente al Congreso de Cardenales y Obispos de la Congregación.

Finalmente, si todos los resultados anteriores son positivos y no hay objeciones, el Prefecto, en Audiencia con el Santo Padre, informa el resultado y pide la emanación del Decreto de Beatificación.

El quinto y último paso sería la canonización -el estatus de Santo-, para el cual la Iglesia Católica exige la realización de al menos 2 milagros.

El Venerable

El padre Gerardino Barracchini explica que la causa de El Venerable no ha avanzado más rápido debido a que muchas personas que reciben su gracia no acostumbran a sustanciar las pruebas requeridas, y, como se explicó antes, los testimonios no son suficientes.

En diciembre de 2018, un Tribunal de la Iglesia Católica se trasladó a San Fernando de Apure para estudiar y recopilar la evidencia necesaria sobre un milagro atribuido al Dr. José Gregorio Hernández.

Una vez cumplido el estricto protocolo exigido por la Congregación para las Causas de los Santos, el Cardenal Baltazar Porras, en compañía de la doctora Silvia Correale (nueva postuladora de la causa) consignó ante las autoridades vaticanas el expediente con toda la evidencia necesaria para proseguir en la senda de la beatificación de El Venerable.

“Ahora estamos en una de las fases de mayor expectativa, esperamos los resultados con mucha confianza. ¡Venezuela será honrada! ¡Sea este año o a inicios del próximo esperamos entonces el pronunciamiento papal!”, exclama el padre Barracchini.

Apoyar es indispensable

El padre Barracchini reconoce que esta causa ha recibido el apoyo de organizaciones y personas que esperan la pronta beatificación del Dr. José Gregorio Hernández.

La Iglesia Católica venezolana espera que sigan siendo muchas las personas y organizaciones que se sumen cada día al trabajo de la Causa del Dr. José Gregorio Hernández ante la Santa Sede, para enaltecer el trabajo de este médico venezolano, cuya vida se dedicó a atender a quienes más lo necesitaban desde una profunda fe en Dios.