Maduro agradece al pueblo de Noruega por rechazar injerencia imperialista
El presidente de la República, Nicolás Maduro, agradeció este martes al pueblo de Oslo capital de Noruega, que salió por miles a las calles a pedir paz para Venezuela y rechazar la guerra en el país, así como las amenazas militares en el Caribe por parte de Estados Unidos.
«Quiero agradecer desde aquí al pueblo de Oslo y de Noruega que por miles se lanzó a las calles hoy a pedir paz para Venezuela, a apoyar a Venezuela en su deseo de paz y desarrollo, a decir no a la guerra por petróleo, no sangre por petróleo», expresó.
Durante una jornada del Consejo de Economía Nacional, el jefe de Estado destacó que los manifestantes rechazaron el galardón a la ultraderechista María Corina Machado, quien ha solicitado abiertamente acciones militares, de invasión y sanciones contra el país. «no al Nobel sangriento decían las pancartas de los manifestantes».
Maduro también agradeció las diversas protestas que se han realizado en apoyo a Venezuela desde varios países del mundo. Destacó las más recientes desarrolladas en el propio EEUU. «El sábado pasado en the United States en el propio Estados Unidos de Norte América, el sábado Más de 65 ciudades, el pueblo, los contribuyentes, los ciudadanos y ciudadanas salieron con sus consignas y sus pancartas a decir, «No war Venezuela.» Yes, peace, yes, peace. Inclusive bailaron la changa famosa».
«Todas las encuestas dicen en Estados Unidos que el 70% de la opinión pública rechaza las amenazas militares contra Venezuela, rechaza una guerra de estas llamadas criminales y eternas, un intervencionismo militar, un intento de cambio de régimen en Venezuela, no, lo rechaza la opinión pública estadounidense (…) Lo rechazan los trabajadores, la juventud, los movimientos sociales, los defensores de derechos humanos, lo rechaza el hombre y la mujer de a pie, quedé impresionado. Más de 65 ciudades, ¿ustedes saben qué es eso? Un fenómeno. Y eso se da gracias a la conciencia creciente en el mundo, de que el mundo necesita paz, igualdad y respeto», dijo el mandatario.
Más temprano
En la fría tarde de este martes, intensas movilizaciones tuvieron lugar frente al Instituto Nobel en Oslo, donde cada año se decide la entrega del Premio de la Paz. Los manifestantes se concentraron para rechazar la decisión de otorgar el galardón a María Corina Machado, figura emblemática de la ultraderecha venezolana y aliada clave de la estrategia de presión de Estados Unidos contra Venezuela, reseña Telesur.
Frente al edificio, activistas de distintos países denunciaron lo que consideran una contradicción flagrante con el espíritu del premio.
Una portavoz perteneciente a organizaciones de solidaridad internacionales declaró a:
“María Corina Machado no representa paz. Representa agresión militar, imperialismo e intervencionismo. Este premio es falso en el contexto de la expansión de las guerras y las operaciones militares occidentales».
La protesta en Oslo resume una indignación que se ha extendido a movimientos de solidaridad, plataformas pacifistas y sectores sociales de distintos países, que ven en este premio un respaldo a figuras que han impulsado sanciones, bloqueos, llamados a intervención militar y violencia política en Venezuela.
Por otra parte, el Movimiento por la Paz Noruego rechazó este martes desde Oslo la entrega del Nobel de la Paz 2025 a la representante de la extrema derecha venezolana, María Corina Machado, denunciando al Comité Noruego por ignorar los principios fundacionales de Alfred Nobel y desviar fondos de su propósito original. El movimiento argumenta que Machado está «lejos de ser la campeona de la paz» que los criterios de Nobel requieren.
El movimiento recordó que el Premio Nobel de la Paz se basa en tres pilares inseparables: la desmilitarización, las conferencias de paz y la cooperación entre naciones en conflicto. Estos elementos, descritos como «una rueda» por Nobel, son fundamentales para su legado. Sin embargo, los voceros lamentaron las «muchas desviaciones» observadas en los más de cien años de historia del galardón, señalando que el comité en Oslo ha ignorado estas directrices «de manera arrogante».
Estas denuncias resuenan con críticas históricas sobre la autonomía del Comité Noruego del Nobel. Ya en 2012, un experto en Suecia señaló que el comité «no es un partido independiente, sino que está basado en la Ley sueca». Más adelante, en 2014, se indicó que la elección de los galardonados «no se debe exceptuar de las limitaciones del Estado».
Los analistas mostraron que la entrega del Nobel de la Paz a la representante de extrema derecha contradice los estatutos del Comité que otorga ese galardón, debido a que Machado mantiene una agenda que promueve la guerra, la invasión a su país y ha defendido abiertamente el genocidio que comete Israel contra el pueblo palestino.
Dijeron que el galardón entregado a Machado es interpretado como un premio al presidente estadounidense Donald Trump y al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu.
Los participantes señalaron que Machado no ha escondido sus intenciones de entregar a Estados Unidos los recursos naturales venezolanos, incluidas las más grandes reservas de petróleo a nivel mundial. Y ha apoyado todas las sanciones impuestas por EEUU contra el pueblo venezolano.
