En su lugar – Últimas Noticias

Una experiencia reciente ilustra los cambios culturales actuales, trascendentales y sutiles que se están dando.
El 31 de octubre, en la noche tocan a la puerta de la casa un grupo de niñas y niños disfrazados pidiendo dulces o trucos, a pesar del bombardeo de los programas de televisión, radio y por internet promoviendo el Halloween en ese momento quien escribe se sintió desubicado, sin saber qué hacer, qué responder: seguir el juego y entregar los dulces, como si se tratara de algo inofensivo; entablar algún diálogo con ellos para buscarle significantes, significado y sentido a esa nueva práctica; o por último no hacer nada, esperar que por cansancio desistieran y continuaran hacia otra casa. ¿Quién o quiénes estaban desubicados?
“Tómate una pastillita de ubicatex”, es un consejo popular que se emplea en Venezuela para estos casos, cuando alguien está en la luna, es decir, en otro espacio, tiempo y situación distinta al de los demás con los que comparte una realidad.
En contraste, la ubicuidad y movilidad son términos resonantes y de moda hoy en el mundo, son las características más resaltantes de las facilidades que se ofrecen con los productos y servicios basados en las nuevas tecnologías de la información y comunicaciones (TICs); por un poco más de dos décadas está ubicuidad se promueve en las estrategias de mercadotecnia de estos productos, con lemas como “dónde sea y cuándo quieras”, inició con las tecnologías de la telefonía móvil, con ya cinco generaciones de tecnología en su haber y la sexta en puerta, pero ha continuado con los nuevos servicios y plataformas digitales sobre la Internet.
¿De ser una característica de las nuevas tecnologías ha pasado a ser también un rasgo cultural mundial?, ¿es un ladrillo más en la estrategia de la mundialización como modelo de desarrollo?
Aún cuando las preguntas son tentadoras, las respuestas van más allá de la intención de la presente reflexión.
Hoy, “lo nice” y “cool” es ser ciudadano del mundo, lo nacional, la patria, eso suena a pasado, anacronismo.
En el ciberespacio, en la internet se vive una realidad entre iguales, sin fronteras, libre de regulaciones, en teoría.
Si está realidad distante y ubicua se impone a la realidad en el lugar puede haber consecuencias a corto, mediano y largo plazo desconocidas.
Premisas
.-La condición humana tiene dos dimensiones desde donde se desenvuelve: la natural, que lo conecta con el planeta y con todas sus formas de vida, de la que es parte inseparable y vital; y la cultural, que lo define y determina en su práctica, su comportamiento, sus valores, su espiritualidad, su identidad, cosmogonía, cosmovisión, el imaginario, su existencia individual y colectiva.
.-Esta dimensión cultural hoy se escinde en dos: una en el territorio, aquí, y otra a distancia mediada por las TICs en un espacio digital, virtual, ubicuo, en una especie de lugar difuso, un “no lugar”.
Para Ilustrar
.-En una conversación popular realizada en una cuenta de medios sociales con un profesor universitario en la que este servidor participó, el profesor exponía que hoy se debe considerar lo global de tanta importancia como lo local para tomar decisiones políticas, para gobernar, para proyectar escenarios y planificar. Incluso es un asunto relevante hasta para ser incluido en la campaña política y luego en la agenda operativa y de comunicación del gobernante una vez electo.
.-En los titulares de noticias difundidas por las múltiples plataformas digitales y en sus variados formatos recibidas por el dispositivo que sea, lo global compite con lo local por la atención de la audiencia. Ya la exclusividad y el monopolio de colocar la agenda mediática la perdieron los medios de comunicación social internacional, con sus respectivas replicas nacionales. El tratamientos de temas mundiales, distantes espacial, cultural, política y hasta históricamente pueden con frecuencia hacer perder el foco del lugar desde dónde se percibe, se interpreta, se habla, incluso hasta desde dónde se siente, llegando probablemente a diagnósticos, conclusiones y decisiones equivocadas.
.-Pasa exactamente igual en la vida cotidiana, aun cuando se tengan perspectiva e ideologías diferentes, por ejemplo, con los vecinos de la cuadra o con los miembros de una comunidad en el territorio más amplios. ¿A la hora de la chiquita con quién se cuenta, por ejemplo en emergencias?, ¿con quién se debe crear un entorno de armonía, donde el encuentro, la cooperación y los puntos de vistas en común sumen y faciliten la convivencia, y porque no, el bienestar de todos ? La prioridad de elaborar políticas y planes conjuntos deben partir de allí, del territorio, de lo cercano, de las bases expandiéndose progresivamente hacia arriba pero siempre desde la realidad compartida inmediata. La política y los planes deben aterrizarse para garantizar su sostenibilidad e impactos. Hay vecinos, socios y aliados.
Conjeturas
.-Hay una deslocalización o externalización del sujeto, del ciudadano y ciudadana común, coincide con la ya avanzada internacionalización o deslocalización de la producción, con un poco más de cinco décadas en los hechos y tres décadas en la teorización.
.-Los innovadores servicios de medios sociales (redes sociales +difusión de contenido) y las plataformas digitales para compartir sobre la Internet facilitan esta deslocalización; ya es un hecho la expansión de las relaciones sociales a distancia para el intercambio comercial internacional, para las relaciones sociales entre personas y grupos de interés, para la intermediación financiera mundial, son frecuentes las ofertas de nuevas tecnologías y servicios para participar o implementar el trabajo colaborativo y a distancia, al igual que la educación a distancia, a la medida y asistida por las TICs. Cada día más se desdibujan la fronteras y se flota por encima de los territorios. Emerge un mundo sin fronteras pero gobernado de hecho por las empresas transnacionales que prestan los servicios.
.-Se trata de nuevos patrones de producción y consumo mundiales, deslocalizados que se reflejan en la producción y reproducción de la vida misma en mucho de sus aspectos.
.-Es más que nomadismo digital, es más que alienación, es desarraigo y “está pasando por debajo de la mesa frente a nuestras narices” sin que nadie se de cuenta de ello.
.-Se está perdiendo el centro, el lugar desde dónde se siente, se hace, se piensa, se dice, se percibe, se interpreta, se analiza, es una especie de deslocalizacion (offshoring) generalizada de las personas en donde poco importa o poco valor se le da a dónde se esté físicamente.
¿Que hacer?
.-Poner a cada quién y a cada cosa en su lugar, es un punto de partida necesario.
.-Se trata de ”salir de la colonia” (como dice el profesor Vladimir Acosta) para ello hay que elegir la opción de la integración.
.-Hay que prestar más atención a lo que sucede con nuestros vecinos, partiendo desde los territorios fronterizos, pasando por el nivel de departamentos, estados y provincias hasta llegar a nivel nacional y regional. En la educación, comunicación y cultura se deben elaborar planes y políticas para abordar estas tareas.
.-Conocer y difundir la historia y la cultura de los países vecinos puede ayudar a encontrar raíces comunes que unen.
.-Promover la integración como se ha dado siempre en la práctica, desde las bases, desde la gente que convive binacionalmente, cultural, social y económicamente.
.-La cultura es viva pero hay que regarla como planta, desmalezarla y nutrirla con vitaminas.