Crítica ‘Tu madre o la mía: Guerra de suegras’ (2024)

Si permaneces pendiente a los diferentes estrenos en cines quizá ya conocías la nueva comedia española de la cineasta Chus Gutiérrez (De Caperucita a loba) con Carmina Barrios, Patricia Bernal, Salva Reina, Paulina Goto o Laura Galán, entre otros.
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Sinopsis de ‘Tu madre o la mía: Guerra de suegras’
Paco y Regina van a casarse, pero no saben que eso desatará una lucha entre sus madres por ver quién decide hasta el mínimo detalle de la boda. Carmen, la madre de Paco, es una experta en el chantaje sentimental para conseguir lo que quiere. Mientras que Catalina, la madre de Regina, es una experta en usar sus contactos para presionar y extorsionar a la gente hasta que se cumpla su más mínimo capricho. La lucha de ambas desata una batalla de proporciones épicas, donde no quedará nada en pie.
Crítica
‘No soy el target de este tipo de películas‘, ‘he sentido vergüenza ajena en varias ocasiones‘… Sí, chicos, al final son las frases de siempre, pero es que creo que existe un problema real con las comedias españolas, especialmente con aquellas centradas en los conflictos familiares que buscan replicar el éxito de Segura y sus ‘Padre no hay más que uno‘. Que sí, que ya lo sé, que no soy su público objetivo, pero, ¿significa eso que el público deba conformarse con tan poco?
Tu madre o la mía: Guerra de suegras es una película carente de estilo, al igual que otras muchas obras de Chus Gutiérrez. En este caso, nos encontramos con una serie de secuencias cliché separadas en capítulos (¿Por qué? Pues no tengo ni la menor ideas) que funcionan más como sketches sin gracias que como parte de un todo. Todas ellas con momentos que aspiran a ser disparatados acompañados de una música de circo machacona que busca darles un aire de Benny Hill para que esbocemos una sonrisa, pero ni con esas.
Carmina Barrios (una actriz que nos encanta) vuelve a dar vida al mismo personaje que lleva años interpretando; mientras que Laura Galán se rebaja a dar vida a un estereotipo andante que ni va con ella ni hace gracia en ningún momento. Patricia Bernal está muy bien, eso sí. Otros miembros del reparto, especialmente los personajes secundario, ofrecen interpretaciones dignas de un grupo de teatro infantil.
Siento ser tan duro, con Tu madre o la mía: Guerra de suegras. Supongo que estoy cansado y desmotivado con las comedias españolas generalistas. Una película que, probablemente, disfrutará un sector del público muy concreto, aquellos de edad más avanzada que no exijan demasiado al cine. Otros, en cambio, quizá quieran arrancarse los ojos en más de una ocasión.