A Venezuela no la intimida nadie
Toda Venezuela se prepara con determinación para enfrentar las amenazas belicistas del imperialismo estadounidense. El pueblo bolivariano fortalece cada la unidad nacional en defensa de la autodeterminación, la soberanía y la independencia por su derecho a la paz, como lo viene demostrando en las masivas movilizaciones que realiza a lo largo y ancho del territorio nacional, mientras se prepara con entusiasmo y disciplina para pasar de una etapa pacífica a una fase superior de defensa, que incluye la lucha armada, en fusión popular-militar-policial, orientada por la estrategia de resistencia activa prolongada y ofensiva permanente.
Las nuevas amenazas imperiales en el Caribe no han hecho ninguna mella en la institucionalidad venezolana, que está blindada para enfrentarlas y lo hace junto al pueblo. El presidente Nicolás Maduro ha dicho: “Venezuela avanza con serenidad porque tenemos la razón y la verdad de nuestro lado (…), somos la verdad y la vida en tremenda lucha contra la mentira, la violencia y la inmoralidad (…); todas estas amenazas violan flagrantemente el derecho internacional y han generado una reacción mundial de rechazo”.
Los venezolanos y las venezolanas estamos lo suficientemente curtidos en esta lucha de resistencia donde siempre hemos vencido. Esta nueva agresión forma parte del libreto que lleva años elaborándose en el Pentágono, con el cual ese imperialismo ha explorado diferentes vías para destruir la Revolución Bolivariana y no ha podido. El comandante Hugo Chávez lo denunció en su momento y hoy lo hace el presidente Maduro. El imperialismo estadounidense, al intentar aplicar sobre nuestro país una operación militar, también atentaría contra la paz y la estabilidad del hemisferio, pues eso provocaría una guerra en toda la región.
Al pueblo venezolano no lo intimidan las amenazas de Washington; al contrario, siempre demuestra una enorme capacidad de resiliencia ante cualquier dificultad, como lo está volviendo a demostrar ahora con la extraordinaria participación del empresariado nacional, así como con el vigoroso impulso del campesinado, de la clase trabajadora y los emprendedores, para seguir garantizando el crecimiento económico que viene experimentando el país, ahora en medio de estas semanas de amenazas de EEUU.
Ya comenzaron las clases, el país está en marcha con clara normalidad, pero alerta y en disposición para lo que sea y donde sea para seguir en victoria.
