Caracas disfrutará tres meses de cine de Chile, Bolivia y Perú

Integración, acercamiento, una mirada a nuestras similitudes y al trabajo cinematográfico que se realiza en Chile, Bolivia y Perú, son parte de la propuesta de la I edición del Festival de Cine Latinoamericano y del Caribe 2023 que, desde el 19 de julio, hasta el mes de septiembre, tomarán a la Cinemateca Nacional, el Celarg, Trasnocho Cultural y espacios a cielo abierto de la capital.
El Circuito Gran Cine y el Sistema Económico Latinoamericano y del Caribe (Sela) son responsables del encuentro que pretende impulsar la cooperación y la integración entre los países de la región y promover la diversidad cinematográfica.
En palabras del embajador de Perú en Venezuela, Librado Orozco Zapata, esta fiesta es “una nueva forma de acercarnos, conocernos y compartir el entretenimiento que también es entendimiento de nuestras realidades”, dijo ayer en una rueda de prensa.
De su país proyectarán: La animación Ainbo, la guerrera del Amazonas de José Zelada y Richard Claus; la comedia Margarita: Ese dulce caos de Frank Pérez-Garland; y Deliciosa fruta seca de Ana Caridad Sánchez.
El representante chileno Jaime Gazmur resaltó la potencialidad del cine como “instrumento constructor de identidad. Tenemos que recuperar la voz y en eso el arte puede jugar un papel crucial”, dijo y agregó que proyectarán la cinta de Andrés Wood estrenada en Cannes y nominada al Goya: Machuca.
El embajador boliviano, Sebastián Michel, informó que sumarán las cintas Juana Azurduy, El corazón de Jesús y El día que murió el silencio.
De esta selección, la directora general de Gran Cine, María Elena Freitas, resaltó “la diversidad de opciones y temáticas para todos los gustos que tendrá el encuentro”.