8 diciembre, 2025
Cantar a los 93 años

Cada 4 de diciembre se conmemora el Día Internacional contra las Medidas Coercitivas. Esta propuesta de resolución, presentada por Venezuela, con el respaldo, entre otros, de los Estados Miembros del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas, busca avanzar la campaña mundial para generar conciencia sobre el impacto negativo y el carácter ilegal de estas acciones, incluyendo sus efectos sobre los derechos humanos, la economía y el desarrollo de países y pueblos enteros. Fue aprobada el 16 de junio de 2025.

Las medidas coercitivas unilaterales aplicadas por Estados Unidos a Venezuela son ilegales e injustas, ya que violan el derecho internacional y los principios de la Carta de las Naciones Unidas. Estas acciones no solo afectan negativamente al pueblo venezolano, sino que también constituyen una injerencia en los asuntos internos de un país soberano.

Las MCU tienen en el científico Ernst Ziegelmeyer del Instituto de Nutrición de Múnich un referente. Este nazi aportó al Reich un importante estudio sobre cómo matar de hambre al pueblo soviético con medidas coercitivas que partían de un desabastecimiento atroz que llevaría al sometimiento de un plan de racionamiento que solo les permitiría el consumo de 250 gramos de pan diarios. De este modo, mediante la combinación del ataque aéreo, el sitio por tierra y el bloqueo naval, los alimentos se acabarían rápidamente y los defensores irían falleciendo por inanición, sin tener los nazis necesidad de luchar y sufrir bajas.

El 29 de septiembre de 1941, Hitler declara: “He resuelto borrar a Leningrado de la faz de la tierra. No nos corresponde a nosotros, ni nos corresponderá el problema de la supervivencia de su población, es decir, de su abastecimiento. En este combate, en el que nuestra resistencia está en juego, es contrario a nuestros intereses salvar a la población de esta ciudad, ni siquiera a una parte de ésta”.

El territorio simbólico y su apartado espiritual encuentra en diversos instrumentos del capitalismo su mayor poder de seducción, logrando con ellos imponer gustos por encima de los íconos que nos dan cohesión como pueblo. Las MCU son parte de un arsenal de guerra multifactorial donde además está la intimidación naval, el robo de empresas venezolanas en el exterior, como es el caso de Citgo, el hurto del oro en los bancos británicos, la difamación mediática, la guerra cognitiva y el antibolivarianismo.

Se trata del enfrentamiento entre la doctrina Monroe y la de Bolívar, dos maneras opuestas de entender los destinos del continente. Con razón nos dice Simón Rodríguez, “la sabiduría de Europa y la prosperidad de los Estados Unidos son, en nuestra América, dos enemigos de la libertad de pensar en América”.

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