El declive ético del Nobel
Por Ilenia Medina
Las decisiones que adopta el Jurado de los Premios Nobel en las distintas areas y temática se consideran, desde la perspectiva de las Instituciones de Noruega, en expresion del acumulado sociologico, cultural, patrimonial e histórico de Noruega.
Sin embargo, con el tiempo, al hacer una revisión de los personajes que han recibido el «reconocimiento del Premio Nobel de la Paz, como a Henry Kissinger, y el desaire a Ghandy, ilustra las graves faltas éticas, axiologicas y filosóficas de quienes integran dicha institución.
En América Latina, y en particular, en Venezuela planteo una interrogante la decisión de Noruega de otorgar a Maria Corina Machado el Nobel de la Paz a quien desde hace 2 décadas ha promovido golpes de Estado, magnicidios e incluso ha pedido abiertamente la aplicación de medidas coercitivas, bloqueos a la economía venezolana, sin importarle sus graves efectos negativos a la población venezolana.
Incluso promueve la persecución de los migrantes venezolanos y aplaude las amenazas de agresión contra su país.
En el día de ayer, en un breve intercambio, con estudiantes y trabajadores del Edo Lara se preguntaban «Cuan fragmentada, perdida debe estar la sociedad Noruega si no exige a la instituciones oficiales de ese país, explicaciones, o revisar el método para asignar premios a personajes más vinculados a los delitos penales humanitarios contemplados en el Estatuto de Roma. La estrecha relación de la Machado con Netanyahu, declarado por los pueblos del mundo como «Enemigo de la Humanidad» deja al fulano Jurado muy mal parado.
En todo caso, al parecer, el único doliente real en esta historia es Donald Trump. Algunos consideran que hubo una componenda del Jurado noruego con Marcos Rubio, la Machado y otros funcionarios de la Casa Blanca quienes están haciendo un doble juego contra el Presidente de Estados Unidos.
El supuesto Premio a Machado por sus «esfuerzos por la paz» es una horrenda fotografía axiologica de quienes conforman dicho Jurado.
