28 septiembre, 2025

Mi madre se las arregló con el personal del cine para que me cuidaran

"Mi madre se las arregló con el personal del cine para que me cuidaran"


Con el estreno en cines de ‘Los 4 Fantásticos: Primeros pasos‘ de Marvel, Pedro Pascal ha vuelto a dejar claro que es uno de los actores del momento. Y también nos ha sorprendido con una de sus últimas confesiones. El actor chileno reveló que, al igual que le ocurrió a muchas otras personas, su amor por el cine comenzó gracias al cine de Steven Spielberg. Concretamente gracias a clásicos como ‘E.T., el extraterrestre‘ y ‘Poltergeist‘. Porque cuando tienes la suerte de cruzarte siendo niño con películas tan impactantes como esas, es normal que acaben sembrando algo positivo.

En el año 1982, Pedro Pascal era un niño que quedó fascinado por esas historias. Y no es para menos, porque por aquel entonces, Spielberg estaba en la cima de su carrera y estos fueron dos de los estrenos más taquilleros del año. Su instinto para conectar con el público convirtió a estas películas en experiencias irrepetibles para toda una generación.

Durante una entrevista en la alfombra roja con Letterboxd, parte del elenco de la película de Marvel habló de sus primeros recuerdos de cine. Joseph Quinn mencionó la comedia musical ‘Bugsy Malone, nieto de Al Capone’ y Julia Garner citó el clásico ‘Eva al desnudo’. Pero Pascal fue más allá y compartió una anécdota que parece salida de una película: aquel verano, el cine fue literalmente su niñera.

“Mi madre tuvo una semana en el verano de 1982 en la que no tenía niñera. Estaba haciendo su doctorado y se las arregló con el personal del cine local para que me cuidaran desde la mañana hasta la noche. Nos dejaban en el cine y yo veía ‘E.T.’ o ‘Poltergeist’ un par de veces, dos veces y media al día”.

Contenido

Un verano con Spielberg

La anécdota de Pascal cobra más fuerza al recordar el contexto. 1982 fue bautizado como el verano de Spielberg, apenas un año después del éxito de ‘En busca del arca perdida’. Ese año se estrenó ‘E.T.’, que es considerada una de sus obras maestras y se convirtió rápidamente en la película más taquillera de todos los tiempos, un récord que mantuvo hasta 1997. Y poco antes había llegado a los cines también ‘Poltergeist’, escrita y producida por él.

‘E.T.’ fue mucho más que un fenómeno comercial —casi 800 millones de dólares en taquilla mundial—. Fue un retrato tierno y emocionante de la infancia. Spielberg volcó parte de su biografía, la experiencia de crecer como hijo de padres divorciados, en la soledad de Elliott y en la amistad imposible con el extraterrestre. De aquella unión nacieron algunas de las imágenes más icónicas del cine, como la bicicleta volando frente a la luna, y que se convirtió después en el logotipo de Amblin.

El secreto de la película fue hablar directamente a los niños, sin condescendencia. El humor, la aventura y las lágrimas convivían con naturalidad: desde la secuencia cómica de E.T. borracho hasta el conmovedor final con la despedida. Spielberg trató a sus jóvenes protagonistas como adultos y obtuvo interpretaciones tan inolvidables como las de Henry Thomas y Drew Barrymore. Y no es difícil imaginar a un joven Pedro Pascal riendo y llorando en cada proyección repetida de aquel verano.

El otro lado de la infancia

'Poltergeist'
'Poltergeist'

Por otro lado, la otra gran obsesión de Pascal en 1982 fue ‘Poltergeist’, un título que a simple vista podría parecer demasiado oscuro para un niño, aunque fue clasificado para todos los públicos —antes de que existiera la categoría PG-13—. La película de Tobe Hooper y Spielberg desató auténticas pesadillas con sus fantasmas, visiones sangrientas y, sobre todo, con el payaso más terrorífico de la historia del cine.

El proyecto nació como un guion de Spielberg titulado ‘Night Skies’, pero cuando no pudo dirigirla por contrato, Hooper tomó las riendas y la transformó en una historia de casas encantadas, aunque la influencia de Spielberg impregna cada rincón de la película.

Más allá de los sustos, ‘Poltergeist’ funcionaba porque estaba anclada en la emoción. Entre monstruos que salen del armario y árboles que cobran vida, el relato seguía a unos padres desesperados por rescatar a su hija del más allá. Spielberg sabía que los niños también necesitan una red de seguridad, y aunque puede que el pequeño Pascal se asustara en la sala de cine, también pudo volver a casa con la certeza de que todo saldría bien al final.

En Espinof | Las 34 mejores películas de ciencia ficción de la historia

En Espinof | «No quería hacer más extraterrestres». Steven Spielberg admite que no le apetecía rodar ‘Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal’





Source link