El charro cantor – Últimas Noticias

¿Quién no ha escuchado hablar de Juan Charrasqueado? ¿Y de aquel Jinete “que vaga solito en el mundo y va deseando la muerte”? En su arribo a cada país, a mediados del siglo XX, las damas se desmayaban y los caballeros se mostraban celosos e indiferentes. Su estampa en la pantalla grande era garantía de taquilla. Es Jorge Negrete a quien aludimos, nacido en Guanajuato el 30 de noviembre de 1911, apodado como El charro cantor, con interpretaciones actorales y musicales que, por sus calidades y fuerzas expresivas, le confirieron un reconocimiento mundial.
Su biografía enfatiza su procedencia de un hogar pudiente: estudiaría en el Colegio Alemán Alexander von Humboldt e ingresaría al Heroico Colegio Militar, obteniendo el grado de teniente de Caballería y Administración del Ejército Mexicano.
En su preparación inicial, muy afín al mundo operístico, cursaría estudios de canto con el afamado José Pierson, dominando su voz de barítono en todo su esplendor.
En 1937 su estrella comenzaría a ascender por su participación en el filme La madrina del diablo, y después de otro trabajo importante el año siguiente, Juan sin miedo, sería, sin embargo, con ¡Ay, Jalisco, no te rajes! que alcanzaría el éxito rotundo. Ya era 1941.
Entre sus películas -estimadas en cincuenta producciones- destacan, además, Así se quiere en Jalisco (1942) El Peñón de las ánimas (1943), Cuando quiere un mexicano (1944), Canaima (basada en la obra homónima de Rómulo Gallegos, representado al controversial Marcos Vargas, 1945), El ahijado de la muerte (1946), Si adelita se fuera con otro (1948), Jalisco canta en Sevilla (1949), Teatro Apolo (1950), Allá en el Rancho Grande (1950), Un gallo en el corral (1951), Los tres alegres compadres (1952), Tal cual (1952), Dos tipos de cuidado (en conjunto con Pedro Infante, 1952), y El rapto (1953).
Una nota digna de resaltar es que Negrete fungiría como fundador del Sindicato de Trabajadores de la Producción Cinematográfica de la República Mexicana, y de la Asociación Nacional de Actores (ANDA).
Un hito en la historia venezolana sería la llegada a Caracas de Negrete, el jueves 11 de mayo de 1949. En la nación sudamericana permanecería 10 días. Arribaría con el reputado Trío Calaveras. Las crónicas de la época refieren que Negrete se alojó en el afamado Hotel El Conde, a menos de una cuadra de la Plaza Bolívar de la capital. Al día siguiente debutaría en el Nuevo Circo, dejándose acompañar de la orquesta de Luis Alfonzo Larraín, de Marina Auristela Guánchez, y del Trío Cantaclaro como anfitriones estelares. El actor mexicano cobraría el estipendio de 19 mil dólares (70.000 bolívares del momento).
Las emisoras más populares -Radiodifusora Venezuela, Radio Libertador y La Voz de la Patria- se responsabilizarían de transmitir el evento sin procedentes. Como gesto filantrópico el artista guanajuatense también cantaría en la Asociación Venezolana de Periodistas a beneficio del Hospital Poliomielítico, asimismo, en el programa Cultura Obrera de Radio Nacional de Venezuela.
Fallecería el 5 de diciembre de 1953, en California, EE. UU. Una cirrosis hepática producto de una “hepatitis c” tempranamente adquirida marcaría su fin. A los 42 años se despedía de su esposa María Félix Jorge Negrete, una estrella refulgente en el firmamento del lar lindo y querido, en una de sus horas más apreciadas y recordadas.