114 detenidos y al menos 50 heridos en jornada de represión en Argentina

La manifestación que cada miércoles convocan los jubilados en los alrededores del Congreso argentino, vivieron esta semana su momento más violento durante el gobierno de Javier Milei. A los jubilados y pensionados se sumaron hinchas de equipos de fútbol en solidaridad con un veterano agredido, por lo que el gobierno ultraderechista alistó un plan de dispersión con el uso de la fuerza bruta.
La multitud de manifestantes fue fuertemente reprimida por un nutrido grupo de funcionarios de las fuerzas de seguridad, lo que dejó como saldo un número de 114 detenidos y por lo menos 50 heridos, entre ellos un fotógrafo que se encuentra en estado grave tras sufrir una fractura de cráneo con una granada lacrimógena.
El Gobierno defiende la actuación de sus cuerpos policiales y señala a la oposición, específicamente al kirchnerismo, de estar detrás de acciones de desestabilización que se decantarían en un intento de golpe de Estado. Asimismo, ha arremetido contra el reportero gráfico herido, Pablo Grillo, al que ha señalado de ser opositor, por ende, «criminal».
Las escenas que dejó la jornada han sido comparadas con las 2001, cuando los manifestantes gritaban al unísono. «¡Que se vayan todos!». En esta oportunidad, la consigna era la misma, mientras exigían la renuncia de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a la que responsabilizan de impulsar la represión y la violencia policial.
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El gobierno justifica «golpear a los ancianos»
El jefe de Gabinete de Ministros, Guillermo Francos, dijo en varias entrevistas que «hay grupos de la política que intentan desestabilizar al Gobierno», haciendo un claro señalamiento al kirchnerismo.
«Se les ocurre la genial idea de poner barras bravas a defender los derechos de los jubilados y eso generó los disturbios», aseveró. En su punto de vista, se utilizó la violencia «como instrumento» y por eso hubo «respuesta de la fuerza de seguridad».
«El grito de ‘¡Que se vayan todos!’ es un grito que se utilizó tantas veces y lo que se pretende es un golpe de Estado», añadió.
Para el jefe del Gabinete estas protestas han «generado la situación de caos en que estaba Argentina cuando el Gobierno asumió el poder». Sin embargo, Francos cree que las movilizaciones de debieron al «resquicio» que causó el caso $LIBRA «para plantear un cuestionamiento» a la Administración de Milei.
Por su parte, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ratificó en su cuenta de X su política de seguridad para reprimir las manifestaciones sociales: «Los violentos detenidos hoy muestran lo peor de la decadencia que estamos dejando en el pasado». A estas afirmaciones se le agregan la grave acusación, sin base, de que quienes protestaban «fueron preparados para matar».
Piden liberar a los detenidos
Si bien Bullrich y el vocero presidencial Manuel Adorni mostraron su satisfacción por los 114 detenidos, la titular del Juzgado de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas N° 15, Karina Andrade, ordenó que todos fueran liberados, recoge Página 12.
En el fallo, que circula en los medios y las redes, Andrade afirma que no había datos sobre el lugar, la hora ni la razón para las detenciones. Asimismo, se sostiene que ninguna de las personas aprehendidas fueron imputadas por la Fiscalía por los delitos de porte de armas, incendios a bienes públicos o lesiones.
En la sentencia, se recuerda que los adultos mayores se encuentran protegidos en la Constitución Nacional, a través de la Convención Interamericana sobre Protección de Derechos Humanos de las Personas Mayores, incorporada a la carta magna.
Del mismo modo, se manifiesta que «la libertad de expresión, junto con el derecho a la protesta (…) permiten a los individuos de una sociedad democrática dar a conocer sus ideas, conocer las opiniones de sus conciudadanos y los actos de gobierno y criticar los actos de sus representantes».
Por otra parte, en una rueda de prensa celebrada este jueves, Bullrich pidió a los clubes de fútbol que expulsen de forma «inmediata» a todos los asociados que participaron de la protesta. También dijo que solicitará a las instituciones que emitan «una declaración de repudio». Sin embargo, es muy poco probable que esto suceda teniendo en cuenta que la iniciativa no surgió desde los clubes, sino desde los hinchas que se autoconvocaron.